Exposición fotográfica de la historia y cultura de un pueblo gomero con identidad propia


Lugar: Restaurante Los Chorros de Epina
FECHA INAUGURACIÓN: 14 MAYO 2023 (Coincidiendo con la fiesta de Mayo del caserio de
Epina)
ENTRADA: GRATUITA
ORGANIZA: Vecinos del caserío de Epina

Las historias orales siempre han sido un recurso tan arraigado que enriquecen la historia de los
pueblos. Algunas de ellas quedan como verdades populares mientras que otras permanecen en el tiempo
como leyendas. En La Gomera encontramos Los Chorros de Epina, un lugar donde se relaciona el amor
con la pureza del agua que brota de su mágico manantial.

En la zona podrás ver que te depara el amor. Para muchos será un cuento pero para otros siempre
habrá algo de cierto. Por ello, desees o no conocer tu futuro amoroso, es recomendable visitar los Chorros
de Epina, un símbolo del norte de la isla.

Epina es un pequeño caserío situado en el municipio de Vallehermoso, en la zona noroeste de la
isla de La Gomera. Un lugar que conserva el encanto de antaño. Llegar a los chorros es muy sencillo.
Dirígete hacia el restaurante Chorros de Epina (carretera GM-1). En sus alrededores hay espacio donde
estacionar el coche para así acercarte al inicio del corto sendero en dirección a los célebres Chorros de
Epina.

Un cartel situado a un costado de la carretera principal señaliza perfectamente el lugar. No tiene
pérdida alguna. El camino hacia los chorros se realiza en suave descenso por el interior del bosque de
laurisilva tan habitual en La Gomera. En 10 minutos se llega a la ermita de San Isidro Labrador y un poco
más adelante se alcanzan los siete Chorros de Epina. Es camino es apto para cualquier persona e incluso
se puede hacer con niños.

Vecino al Parque Nacional de Garajonay, Epina es un caserío que ha estado tradicionalmente
vinculado a cultivos hortofrutícolas. Está formado por unas decenas de casas de entre las cuales muchas
son de piedra y barro con tejas árabes y cubiertas a dos aguas con más de 200 años de antigüedad y bien
conservadas, aunque el caserío está prácticamente deshabitado, aunque hace unos 40 años llegaron a
residir aquí más de 100 vecinos.

Actualmente hay unos cuantos terrenos cultivados de papas, uvas y millo, y toda la zona está
rodeada por sabinares, palmerales y Monteverde, así como es paso de diferentes senderos que van hacia la
cuenca norte o hacia Alojera y Tazo.
Epina está justo en el límite noroeste del Parque Nacional, y del Monumento Natural del Lomo del
Carretón.

Ermita de San Isidro Labrador, patrón de los agricultores
La imagen de San Isidro Labrador, patrón de los agricultores, fue donada a la parroquia de San
Juan Bautista de Vallehermoso por un vecino, don Manuel Moral Roldán a principios del siglo XX.
Durante un tiempo permaneció custodiada hasta que se encontró un lugar donde levantar una ermita que
cobijara al santo entre el monteverde de Epina.
Según se extrae de la información testimonial de los vecinos la ermita se inaugura en el año 1958.
Este lugar es escenario de dos fiestas al año. Una en mayo con motivo del día del santo patrón de
los agricultores y otra en agosto con motivo de la festividad de la Virgen del Carmen.

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